Redacción Guayaquil
La dirigencia de Unidad Popular (UP) demandó hoy lunes 2 de agosto, una respuesta inmediata del Gobierno frente a la huelga de hambre que llevan a cabo más de 80 maestros de la Unión Nacional de Educadores (UNE), en 12 ciudades del país.
Geovanny Atarihauana, director nacional de esta agrupación política y el dirigente de Guayas, Alonso López, llegaron hasta la Plaza de San Francisco, en pleno centro de Guayaquil, para expresar la solidaridad del partido político frente a la medida de hecho que ya suma 22 días.
Los educadores demandan la puesta en vigencia de las reformas a la Ley Orgánica de Educación Intercultural (LOEI), demandada ante la Corte Constitucional, luego de haber sido aprobada por la Asamblea Nacional.
Atarihuana advirtió al gobierno de Guillermo Lasso que la medida de hecho puede radicalizarse si la CC no emite una resolución al respecto. “Está medida rebasa al magisterio y se convierte en una lucha de todo el pueblo”, dijo.
Dijo que si el Ejecutivo mantiene su pasividad ante una huelga, donde los manifestantes comienzan a sentirse débiles por no ingerir alimentos, habrían consecuencias lamentables.
Esta mañana, un grupo de maestros cerraron la avenida Nicolás Lapentti, en el tramo Durán-Guayaquil, con quema de llantas y otros obstáculos. La Policía debió intervenir para devolver la normalidad al sitio.
El sábado, monseñor Luis Gerardo Cabrera, presidente de la Conferencia Episcopal Ecuatoriana, visitó a los huelguistas en su sitio de huelga como muestra de apoyo.
Alonso López, director provincial de UP, sostuvo que la manifestación de los maestros en una acción justa por sus derechos logrados a través de la reforma a LOEI. (I)