En Guayaquil se investiga el derribamiento de varios postes de alumbrado público, en la avenida de Las Américas.
Redacción Quito
Después de dos días de feriado energético, el Gobierno declaró al sector en estado de excepción debido a la crisis, aparentemente, originada por un sabotaje.
Daniel Noboa, presidente de la República, firmó ayer, viernes 19 de abril el Decreto Ejecutivo 229, para declarar la medida.
A través del documento, dispone que los militares y policías estarán a cargo del resguardo en las diferentes hidroeléctricas de todo el país, a fin de evitar sabotajes.
El documento señala “Declárese el estado de excepción por grave conmoción interna y calamidad pública, en todo el territorio nacional, causada por la emergencia en el sector eléctrico con el objeto de garantizar la continuidad del servicio público de energía eléctrica”.
También dice que el Ministerio de Economía y Finanzas entregará los recursos suficientes para atender el presente estado de excepción por grave conmoción interna y calamidad pública, pudiendo disponer de los fondos públicos necesarios excepto los de salud y educación.
El nuevo estado de excepción no contempla toque de queda y tendrá una duración de 60 días. (I)