Redacción Quito
Virgilio Hernández, actual militante del correismo y uno de los beneficiados con las 268 amnistías dadas por la Asamblea Nacional, señaló hoy, miércoles 16 de marzo del 2022, que por un Twitter no se lo puede acusar de rebelión.
“Se cae el paquetazo o se cae el Gobierno”, era la frase de guerra del militante progresista durante los actos del vandalismo de octubre del 2019.
“Se habla de la destrucción de Quito, pero quién responde por las personas fallecidas, las heridas, las que perdieron el ojo…”. Hay que tener el relato completo, dijo Hernández al buscar una forma de justificación a las acusaciones que recaen sobre él y su coidearia Paola Pabón, prefecta de Pichincha.
El legislador andino dijo que ser correísta se ha convertido en sinónimo de ser perseguido, sin embargo, se le recordó que en tiempos del correísmo: 2.187 personas fueron acusadas por el delito de ataque y resistencia; 198 por paralizar servicios públicos; 43 por terrorismo, y uno de ellos por el acto de terror de salir a manifestar con el monigote de un borrego.
Ese fue el caso del chófer de una vieja camioneta fletera de Guayaquil, Francisco Sanpedro, a quien se lo detuvo con una operación policial de alto nivel. Después de lo acusó de terrorismo y transporte de armas químicas y nucleares.
El humilde chófer llevaba en su vieja camioneta banderas y un borrego confeccionado con cartón, propiedad del Frente Popular, para una protesta social. (I)